viernes, 20 de mayo de 2011

Angel of Death





Ahora siento tu fría mano Muerte, ahora que finalmente has atravesado mi pecho con tu garra de hierro, las esquirlas de mis huesos salen de él liberadas, los infinitos y pequeños rubíes humedecen tu oscura forma. Sujetas mi corazón con fuerza, éste aún late, pero tus dedos se clavan en él y comienza a pararse, muy lentamente.
¿Quién dijo que en el momento de la muerte uno se sentía en paz?
Siento cómo los demonios agarran mis pies salvajemente mientras me hundo en un fondo negro, siento cómo las costuras que ataban mi corazón casi inerte al pecho comienzan a deshilacharse, tiras de él y, hábilmente, lo extraes haciendo que de mis labios emane un grito de dolor y rabia, cierro los ojos con fuerza para no mirarte, las criaturas infernales que ansían arrastrarme al Vacío juegan con mi cuerpo a su criterio, arrancan mi piel, uno de ellos agarra un mechón de mi rubio cabello y tira hacia abajo, haciendo que mi cuerpo se doble dolorosamente...ahora lloro...pero no por el dolor, sino porque, ahora ya es seguro, no volveré a verte...no me esperes...tu príncipe ha caído del caballo...

Los violines de la muerte comienzan a sonar, caigo lentamente...siento cómo mi cuerpo se abrasa, abro los ojos y no te veo, los cierro y te tengo delante...Creo que mantendré los ojos cerrados, así aún podré verte sonreír.

Ese haz de luz que tú eras para mí...ya no lo veo...la oscuridad lo ha eclipsado con su manto.

Ya no puedo sentirte.
Mis pensamientos son un eco, y mis sentimientos han sido vilmente destrozados, ya ha llegado el final de mi camino, este camino que os he narrado.
Disfrutad de los pequeños momentos que pasáis con esas grandes personas, y así, no podréis arrepentiros.
Acabaré esta narración con una cita...


"Vivir a conciencia, extraer todo el meollo a la vida...para no descubrir, en el momento de la muerte, que no había vivido..."

Henry David Thoureu

1 comentario: